Nightbringer, Akhlys, Bestia Arcana, Excommunion y más recientemente Aoratos, todos orbitan (de una forma u otra) el mismo núcleo creativo que se expresa a través de atmósferas oscuras que deambulan entre dimensiones de miedo, terror y oscuridad. La estética del ambiente oscuro también es un elemento distintivo, incluso si todos comparten una fuerte dimensión atmosférica. De hecho, el álbum debut «Supplication» (2009) es, en esencia, un lanzamiento de dark ambient con matices de black metal, mientras que el clásico moderno «The Dreaming I» (2015) invierte el enfoque al ser un álbum de black metal con capas de dark ambient. El vínculo entre ellos, aunque tenue, está en la atmósfera aterradora que ambos despliegan, una atmósfera que flota entre las dimensiones aterradoras del sueño y que se extiende hasta su última obra «Melinoë» (2020), con el cual estarán girando en Latinoamérica psando por colombia en este 2023.